Mindfulness para principiantes: cómo empezar a vivir en el presente
- Uchi Vargas

- 25 sept
- 2 Min. de lectura
Introducción
¿Cuántas veces te has sorprendido reviviendo lo que pasó ayer o preocupándote por lo que pasará mañana? La mente tiene ese poder: llevarnos al pasado o al futuro sin que nos demos cuenta. El problema es que, cuando vivimos atrapad@s en esos pensamientos, nos desconectamos del único momento real que tenemos: el presente.
Aquí entra el mindfulness, una práctica simple pero transformadora que te permite volver al aquí y al ahora, reduciendo el estrés, mejorando tu concentración y ayudándote a vivir con mayor plenitud.
En este artículo te compartiré qué es el mindfulness, cómo empezar si nunca lo has practicado y algunos ejercicios prácticos que puedes integrar en tu día a día.
Qué es el mindfulness?
El mindfulness, o atención plena, es la capacidad de estar presente en el momento con apertura y sin juicio. No se trata de “vaciar la mente” o “dejar de pensar”, sino de observar lo que ocurre dentro y fuera de ti con curiosidad y aceptación.
Los beneficios del mindfulness han sido ampliamente estudiados por la ciencia:
Reduce los niveles de estrés y ansiedad.
Mejora la concentración y la memoria.
Aumenta la autocompasión y la gestión emocional.
Fortalece el sistema inmunológico.
Por qué cuesta tanto estar presentes?
Vivimos en piloto automático. Revisamos el celular mientras comemos, trabajamos mientras pensamos en lo que falta hacer, hablamos con alguien pero estamos pensando en otra cosa.
Este ritmo nos lleva a sentirnos desconectadas, cansadas y sin energía. La buena noticia es que podemos reentrenar la mente para regresar al momento presente, igual que fortalecemos un músculo en el gimnasio.
Cómo empezar a practicar mindfulness (paso a paso)
1. Empieza con tu Respiración
La respiración siempre está contigo.Prueba este ejercicio:
Inhala profundamente contando hasta 4.
Sostén el aire 2 segundos.
Exhala contando hasta 6.
Hazlo durante 2 minutos y observa cómo cambia tu energía.
2. Practica el Escaneo Corporal
Cierra los ojos y recorre tu cuerpo mentalmente desde los pies hasta la cabeza.Nota si hay tensión, incomodidad o calma, sin querer cambiar nada.Este ejercicio te ayuda a reconectar con tu cuerpo y soltar estrés acumulado.
3. Mindfulness en lo Cotidiano
No necesitas sentarte a meditar para practicar mindfulness. Elige una acción diaria (lavarte las manos, tomar café, caminar) y hazla con plena atención: observa las sensaciones, los aromas, los sonidos, el movimiento.
4. Usa Recordatorios
Pon una alarma en tu celular que diga: “Respira. Vuelve al presente”. Esos pequeños recordatorios son claves para entrenar la mente.
Errores comunes al empezar
Esperar resultados inmediatos: el mindfulness es un hábito, no una pastilla.
Pensar que “no sirves” porque tu mente divaga: la mente siempre divagará, el punto es traerla de vuelta con amabilidad.
Querer hacerlo perfecto: no se trata de hacerlo bien, sino de hacerlo con constancia.
Una invitación a tu práctica personal
El mindfulness es más que una técnica: es un estilo de vida. Cuando empiezas a vivir más en el presente, notas que tu mente se calma, disfrutas más lo simple y conectas mejor contigo y con los demás.
Conclusión
No necesitas horas libres, ni una gran disciplina, ni ser “espiritual” para practicar mindfulness. Solo necesitas dar el primer paso: detenerte, respirar y regresar a ti.

✨ Recuerda: el presente es el único lugar donde la vida realmente ocurre.



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